Crítica de cine: Private Tropical 15 "Fashion in Paradise" (2005) (Liz Money, Jennifer Acetone, Barbara Boys)
El filme arranca con un plano frontal de una furgoneta estilo Rodius acercándose hacia la cámara. ¿Qué transportará en su interior? Pues a un equipo de rodaje que ha elegido un celestial destino caribeño para rodar un spot sobre una bebida energética. El marketing funciona así, asociando sensaciones y experiencias a un producto concreto, para conquistar al potencial comprador y obligarle a aflojar la mosca cuando va al supermercado.
Private Tropical 15 Fashion in paradise trailer (VOSE)
Primera parte de la película Fashion in Paradise (VOSE) en Youtube
Segunda parte de la película Fashion in Paradise (VOSE) en Youtube
El plot a priori es flojo, pero tiene más chicha de la que aparenta. No os desaniméis.
Todos parecen estar cansados del largo viaje en avión y con ganas de llegar al hotel. Es totalmente comprensible, sin embargo, hay una modelo llamada Claudia realmente cargante que no deja de quejarse: tiene hambre, sed, calor y sueño; el combo completo, vaya. Todos conocemos a esa persona que siempre le pone pegas a todo.
Dando la turra incluso antes de llegar
El productor le alarga un botellín a la modelo para que deje de taladrar al personal, pero no logra su objetivo ya que el agua está más caliente que los meados. La mano maestra del director Max Bellocchio se nota en que el tele espectador experimenta en sus propias carnes ese deseo por llegar al destino. Uno se deprime tan solo de imaginarse con semejante acompañante en la cola de facturación o en pleno vuelo.
Armando, el chófer, aguanta la salmodia con estoicismo
Por fin, el viaje termina y en la villa les recibe Caterina, la maquilladora, una rubia de buen ver. Paul Baldini, el fotógrafo, le deja bien claro a Calvin, el productor, su hartazgo hacia Claudia y su actitud negativa, y eso que ni siquiera han comenzado con el rodaje. Calvin, tajante, le responde que la agencia manda y que ha pagado mucho dinero para que Claudia esté en el spot. Toca aguantar sus lamentos e impertinencias. Deciden quedar al día siguiente a las 11:00 para comenzar el photoshooting.
Villa situada en la urbanización Lomas Mironas de Sosuá, cerca de la Carretera El Choco. En las siguientes coordenadas
Screenshots de la villa en un vídeo de Youtube
La llegada en Toyota Previa de primera generación a la villa
La finca es la número 42
"No me jodas, Rafa"
Paul es más duro que un Lada Niva e impertérrito ante el jet lag y el cansancio, propone a la otra modelo, Sandra, ir a la playa Gazibo a darse un baño. Hay cierta complicidad, así que damos por hecho que se conocen de sesiones de fotos previas. Al final, en este gremio todo el mundo se conoce. A la orilla del mar nos percatamos de que la rubia es clavadita a Jennifer Aniston.
Imagen de la película de la playa Gazibo
Tras refrescarse, deciden irse lejos de la arena ya que los granos son un incordio, y allí se dejan llevar a ritmo de una música digna del Rey León (bajo estas líneas).
Por la noche, durante la cena en el hotel, se comunica al equipo un cambio de planes. Nada de quedar a las 11 como unos marqueses. Al día siguiente toca madrugar y la sesión dará comienzo a las 7 de la mañana. Esto, cómo no, altera a Claudia, que se niega en rotundo. Dice que está exhausta con el viaje y aprovecha para malmeter contra la comida, contra su habitación y contra el mundo en general, antes de levantarse de la mesa, malhumorada. ¡Menudo pelmazo de tía!
"Como sigáis en este plan, yo me levanto y me voy"
Calvin entra en un local de fino diseño británico y pide su whisky doble, nada más entrar. Escoge un lugar estratégico en la barra, entre dos rubias que quitan el hipo. Tonto no es. Ellas saludan con una sonrisa. Esto tiene pinta de club de alterne, Calvin, atento a las señales.
Para ligar, no hay mejor lugar que un lupanar
Una de ellas le pregunta si es su primera visita al Caribe (única pista en todo el filme sobre el emplazamiento de esta nueva edición de Private Tropical. Según xcritic fue filmada en Costa Rica, aunque en realidad se trata de República Dominicana, en concreto en los alrededores de Cabarete) y a qué se dedica. Calvin les responde que es productor de cine, y como si estuvieran ante el mismísimo Harvey Weinstein, le ofrecen un trío en un lugar más tranquilo, sin tiempo para la seducción y el engatuse.
¡Calvin, has ido a un puticlub! Eso no vale. Por si teníamos alguna duda, Svetlana lleva un consolador en el bolso. Blanco y en botella.
Arranca el rodaje del spot
Al día siguiente, comienza el photoshooting en playa Gazibo. Sandra, que se parece a Jennifer Aniston cada vez más, y la morena inaguantable posan con la bebida energética de Private, que debe ser algo así como viagra en estado líquido. Es una bebida que existió, dicho sea de paso, aunque ya no se produce.
A esta agencia de publi le van a caer 14 demandas por conducta machista
Todo parece ir sobre ruedas, hasta que en el ecuador de la sesión de rodaje, Claudia alega estar cansada hoy también y que basta de fotos por el momento. Esta chica tiene menos ganas de trabajar que Cassano... Paul y ella discuten acaloradamente, en ruso, pero esto no cambia el desenlace y el primer photoshooting se queda a medias.
Paul le transmite de nuevo a Calvin su malestar y asegura que nunca ha visto a una modelo tan arrogante. El productor le replica pidiéndole que se relaje y que necesitan a esa modelo. El fotógrafo acata la orden a regañadientes. La venganza se va cociendo a fuego lento.
Calvin, el apagafuegos
Antes del atardecer, cuando todo el grupo de rodaje está tomando los últimos rayos de sol en la playa, Paul reconoce al famoso productor de cine alemán Herman Kroff, y se acerca a saludarle, con talante reverencial. El resto de las chicas mira con curiosidad, especialmente la ambiciosa Claudia, que cree que su talento no se corresponde con su caché actual.
Es usted un paradigma para mí, señor Kroff
Al parecer, Herman está en el país rodando una película de alto presupuesto. Paul, cargado de buenas intenciones, les propone a las chicas ir a saludarle porque, quién sabe, quizás tenga algún papel para ellas. En ese momento ninguna se acerca, ni siquiera Claudia, aunque opta por quedarse allí con expresión desinteresada, mientras el resto se marcha al hotel.
Esa misma noche, en el restaurante del resort, Herman Kroff cena en soledad en la mesa de al lado. Esto haría sospechar a cualquiera. ¿Un pastoso cenando en un restaurante de medio pelo, aquella comida de poca calidad de la que se quejaba la propia Claudia? Pero ella está cegada por su ambición y no piensa con claridad.
"La casualidad mató al gato" (Amador Rivas)
Claudia se acerca y se presenta como Claudia Shiffle y, en el apartado de parecidos razonables tiene un aire bastante marcado a la actriz española Natalia Sánchez, Tete en la serie Los Serrano. Herman Kroff le saluda gustoso y le permite sentarse a su lado.
La modelo pronto deja entrever que se ha enterado de que va a filmar una película en la isla y le confiesa que estaría interesada en actuar en ella. El teutón, natural de Hamburgo, le responde que se ajusta perfectamente al papel y que era una lástima que tuviese un contrato en vigor con una agencia para el photoshooting de la bebida energética. Claudia le rebate que el contrato es papel mojado y que puede romperlo cuando le plazca. Ante ese ofrecimiento, Herman le entrega una tarjeta de visita con una dirección, para que se reúna con el director de la película. En dicha reunión podrán tratar en profundidad las condiciones del contrato.
"Caña... sedal... y... la presa"
Al día siguiente, nadie encuentra a Claudia. Paul la ha buscado por todas partes, incluso en su habitación, pero nadie sabe nada. Paul finge estar más enfadado que preocupado. Calvin tampoco entiende nada. Deciden dar el día libre al resto de las chicas.
Segundo día y ya tenemos a gente de huelga... Puñeteros sindicatos
Pero tranquilos, la insoportable Claudia está reunida con el director de la película, Michel Fleur, en una villa de ensueño. Claudia comienza la reunión con exigencias, alegando que es una top model mundial. Incluso le extraña que Michel no reconozca sus facciones.
Ambos acuden frescos a la reunión de trabajo
Además, Claudia miente al decir que cobra 80000€ al día con la agencia de publicidad, cuando en realidad ese es el montante total. Michel fuma un habano en calma y no semeja estar impresionado. Sin pestañear, le ofrece un contrato de 900000€ por salir en la película, pero tendrá que someterse antes al derecho de pernada del director. Claudia, con su tocado de sevillana y olé, accede a todo con tal de llegar a Hollywood.
Vamos a analizar tus aptitudes a fondo...
De nuevo en el hotel, Claudia sigue dando por saco. No contenta con su más que posible fichaje con una productora de postín, pide un aumento de salario a Calvin y Paul durante la cena, intuyendo que le van a mandar a freír espárragos, que es lo que quiere. Paul Baldini intenta convencer a Calvin de que busque a otra modelo, por la zona si hace falta, pero el productor tiene las manos atadas porque la agencia quiere a Claudia Shiffle y a nadie más.
Ni una comida en paz
A la mañana siguiente, parece que Calvin ha conseguido que la agencia acceda a un, a priori, sustancioso incremento de los emolumentos. Sea como fuere, Claudia posa de nuevo en compañía de Sandra "Aniston". El escenario es más selvático, en contraposición con la playa del primer photoshoot, y las posturas van volviéndose cada vez más tórridas.
Private Energy Drink
En plena sesión, Claudia no deja de mirar su reloj para el desconcierto del fotógrafo. En un momento dado, pregunta a su auxiliar si le ha llegado algún mensaje, e incluso descuelga una llamada, tras la cual deja a todo el equipo plantado. Estamos ante el divorcio definitivo.
Cuando te llama un número desconocido en pleno funeral...
Se fue se fue, el perfume de sus cabellos...
Calvin, que además de putero es un calzonazos, informa a Claudia de que mañana a las 8 de la tarde continuarán con el photoshoot, a la luz del ocaso. Paul le rebate cabreado, para que reaccione. Sandra, siempre servicial y complaciente, pregunta si continúan con el photoshooting, pero cunde el desánimo y deciden terminar por hoy.
Esa noche, Calvin va de nuevo de marcha, pero esta vez a una cita con una pareja en una piscina interior con una decoración de villa romana. El productor, sin duda, es muy fuerte de mente y, a pesar de los problemas con Claudia, saca energías para una aventura más; previo pago, por supuesto.
Claudia acude a la jornada siguiente a la villa Kroff, para la firma del contrato con el productor alemán y el director Michel Fleur. Vestida con sus mejores galas y con pocas ganas de leer el texto jurídico propio de estos documentos; le prometen 200 de los grandes para hoy no, para mañana.
Mas letra pequeña que en un contrato del Fórum Filatélico
Cambia más veces de peinado que la Princesa Amidala
La reunión tiene lugar en Villa Coco Mar, cerca de Cabarete
La casa actual ha sido muy reformada
El tejadillo ha cambiado
Imagen aérea de Google Maps y coordenadas
Imagen de la película
Los senderos del jardín se mantienen igual que hace casi 20 años
Como curiosidad, un sirviente se deja ver al fondo, durante la reunión
Eso sí, el encuentro termina con una gran fiesta a cuatro. Para triunfar en la televisión tienes que pasar por el aro y así ha quedado demostrado con numerosas sentencias judiciales contra este tipo de abusos. No nos llevemos las manos a la cabeza porque la realidad siempre supera a la ficción.
Las 9 de la noche y esta no aparece...
Calvin me recuerda a ese amigo perdidamente colgado de esa zorra que le pone los cuernos, le desprecia y le humilla delante de todos. Y vuelve a darle una oportunidad tras otra: el típico perrito faldero. Pues así es Calvin. Al final, he llegado a la conclusión de que en realidad se muere por los huesos de Claudia Shiffle, es la única explicación coherente. De hecho, el productor parece sorprendido porque la modelo se retrase, y eso que está ante el enésimo desplante. Paul, por su parte, piensa: "nada nuevo bajo el sol"
Cuando llega, Claudia les entrega el contrato sin mediar palabra y da por terminada la relación laboral, ignorando la amenaza de no percibir ningún dinero. Paul comienza a increparla en ruso y por poco no llegan a las manos.
сидеть там, черт возьми!!
Calvin se siente traicionado, aunque esperando una vez más que recapacite. Lo que decía: enamorado hasta el tuétano. El fotógrafo zanja la discusión con un sonoro "Rrrrabo indarebeska" del que ardo en deseos por saber su significado. Calvin reconoce por fin, que el viaje ha sido un gran dispendio de dinero y que no va a servir para nada porque no pueden ni siquiera usar las instantáneas de los photoshoots previos. Peor, imposible.
Paul "Bandidi" ve una oportunidad
Pero donde unos solo ven problemas, otros ven una oportunidad. Paul propone hacerles fotos a la maquilladora y a la auxiliar, en sustitución de Claudia. Añade además que ya ha hablado con ellas previamente y que quieren el mismo salario que iba a ir destinado a la modelo estrella. Sabe que a Calvin no le queda otra opción que aceptar las condiciones, por draconianas que sean. Seguramente el bandido de Paul quiere llevarse una buena comisión con esta astuta jugada.
Al día siguiente, en la sesión de fotos solo posa Sandra "Aniston", que esta vez directamente anuncia la bebida energética como si de un Satisfyer se tratara, con las tetas al aire y el culo en pompa. Todo parece indicar que la agencia denegó los 160000€ que pedían las dos novatas. El pobre Paul se queda sin su mordida, pero también es un tipo de mente fuerte que aprovecha las ocasiones que se le presentan, y decide sacar partido de las dos últimas horas que les quedan en el paraíso, antes de marcharse al aeropuerto. A sabiendas de que la auxiliar y la maquilladora están sin trabajo, las encandila ofreciéndoles un nuevo empleo, aunque tienen que pasar un casting previo, para variar. El mundo del cine está podrido.
Fue a por trabajo y le comieron lo de abajo...
Un giro final, digno del buen cine
Por otro lado, Claudia llega a la otra villa Kroff y ordena a un señor del servicio, que se encargue de su trolley. Todos a estas alturas odiamos a Claudia con avaricia. El jardinero está desubicado y no acierta a comprender a la forastera. Ella se sorprende de que no la reconozca, como supermodelo que es, aunque le resta importancia y le indica que ha quedado con el señor Herman Kroff. La perplejidad del señor va en aumento y se ve obligado a dejar de lado sus quehaceres para intentar ayudar a la joven.
Rapidito, y ponme un mojito
La escena se rueda en la villa 10a de Hacienda El Choco, pero cuando todavía tenía el techo de estilo tribal. Se filma desde un coche en este vídeo de Youtube
Pedazo de villas en Cabarete alquilaba el Sr Kroff
Poniendo fin a la confusión, le da la triste noticia de que el señor Herman Kroff del que habla, falleció hace nada menos que cinco años. Claudia piensa para sus adentros que si esto es así, o ha tenido sexo con un fantasma, o algo no cuadra. Pronto sale de dudas. El jardinero le adelanta que lo más probable es que, los supuestos productor y director de cine, sean en realidad los encargados de la piscina, que se dedican a encender la depuradora y a pasar el limpiafondos. La descripción encaja con la apariencia de ambos hombres.
A Claudia Shiffle le entran calores de repente, pero el marrón no termina ahí, ya que en ese caso debe regresar a París y le exige que la lleve "quickly" al aeropuerto, para unirse a su antiguo grupo lo antes posible. El jardinero le baja los humos con elegancia: en primer lugar, no tiene coche y, en segundo, el aeropuerto está a 5 horas de viaje, es media mañana y el vuelo a París sale poco después de mediodía, así que es materialmente imposible llegar. Además, el vuelo directo a la capital francesa tiene una frecuencia muy limitada: cada cuatro días. Podría coger vuelos con escalas, pero la supermodelo Claudia Shiffle solo viaja en vuelos directos... Tampoco hay teléfono para llamar a un taxi, así que le va a tocar regresar al downtown haciendo autostop... Menudo panorama.
"...debería haber pasado, ¡pero no lo hice!, y ¿sabes por qué? ¡por el puto dinero!"
La vida le ha dado un duro revés y ha aprendido varias lecciones. La primera es que la lealtad es sagrada y cuando se quebranta, el karma no tiene piedad; la segunda es que no debes fiarte de las apariencias; y la tercera es que nadie, absolutamente nadie, conoce a Claudia Shiffle.
No estaba muerto, estaba de parranda
La película llega a su fin con el fotógrafo Paul pagando al supuesto Herman Kroff por su gran trabajo interpretativo. Después pone rumbo al aeropuerto para volar a París. Al menos no tendrá que aguantar a Claudia en el viaje de vuelta. Un gran giro final
FIN
VALORACIÓN: 7/10
Ficha:
Private Tropical 15 "Fashion in paradise"
Título en castellano: “Moda en el paraíso”
Año: 2005
Género cinematográfico del argumento: comedia
Destino paradisíaco: República Dominicana
Actores estelares: Kathy Undersun, James Bromas, Suzie Zarina, Veronica de Arousa, Philippe Bean, Liz Money, Thalia Olives, Jennifer Acetone, Barbara Boys, Kira Valiente, Kevin Thong, George Bull, Horst Sharon
Dónde la puedo encontrar: Private o en una sencilla búsqueda en Google
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