Crítica de cine: Private Tropical 20 "Caribbean Dream" (2006) (Veronica de Arousa, Krystina Cee, Nikki Cider)
Una melodiosa sintonía tropical nos recibe en los créditos iniciales de Caribbean Dream de Max Bellocchio. El título de esta película es un claro guiño al sueño americano, pero con palmeras y daiquiris en la ecuación. El compositor, como acostumbra este cineasta, es Oreste Fiengo y un sinfín de imágenes confusas se nos muestran de forma agitada. Estamos ante una nueva tragicomedia caribeña cargada de líos amorosos, estafas y combustible de buques.
Trailer de Private Tropical 20 Caribbean dream (VOSE)
Versión argumental de Caribbean Dream (VOSE)
Un teutón con el pelo teñido protagoniza la primera escena, y le entrega a Jason, un comercial cuarentón con la sensación de haber dejado escapar ya demasiados trenes en su vida, una lista para hacer telemarketing.
Negociando con los pies en la arena
En ese valioso documento hay decenas de referencias con nombres y números de teléfono con las personas que quieren adquirir una propiedad en la isla (dicen que es Isla Granadina, pero estamos en Guadeloupe como veremos más adelante). El germano asegura que todavía no han sido contactados y Jason le solicita que aclare ese extremo: "eso significa que no los habéis telefoneado todavía"…
Mueca de reunión matinal
A priori, desde el punto de vista de un comercial experimentado sería un punto negativo hacia esa lista, que podría ser un batiburrillo de números recogidos en encuestas a pie de discoteca, sin embargo la réplica de Jason tiene otro objetivo: "así que podemos enseñarles cualquier villa y pedirles una señal" (no necesariamente una de las villas que ya tuvieren en mente).
Look de ciclista del Festina
El alemán con el pelo oxigenado le refresca en ese punto de la reunión que Jason debe cubrirles todos los gastos a los que visiten las villas: viajes en avión hasta la Conchimbamba, hotel todo incluido, shuttle al aeropuerto... y por supuesto Jason debe mantener su estructura empresarial de secretarias, administrativas y expertas en relacionamiento.
Infraestructura de esquema Ponzi
Jason duda por un momento, pero el negociante le recuerda que le pagará 100.000 euros al final del trabajo, y también le subraya que los compradores además de ver la casa, quieren diversión, así que esperan un servicio completo, con todas las letras.
La experiencia se da el apretón de manos, en una imagen
Sin exceso de empatía, el hasta ahora propietario de la base de datos le exige el pago inmediato de la contraparte, 6000 dólares en efectivo: “ahora mismo quiere decir ahora”, enfatiza. Toca revisar un poco los antecedentes de Mr.X (no tiene un nombre oficial en la película, al igual que sucediere con Daniel Craig en Layer Cake). Mr.X ahora vende listas de contactos al mejor postor en el Caribe, pero antes de eso se había dedicado en Europa a vender modelos de networking en formato franquicia, e iba a las oficinas de las principales ciudades con un maletín negro y un escolta con apariencia de alto mando de las SS, esquilmando a diestro y siniestro. Aquello saltó por los aires y tuvo que aplicar una política de tierra quemada. Tras una breve época en El Cairo en la que no pudo hacerse rico, se trasladó definitivamente a las Antillas francesas. Podemos presuponer que, aunque haya mutado su modelo de negocio, el fondo seguirá siendo igual de turbio, pero no nos apresuremos todavía.
Jason traza una estrategia desde el primer momento. En el pasado estuvo vendiendo enciclopedias de 50 volúmenes, novelas en latín y seguros de decesos. Ha estado en los sectores más duros del ámbito comercial y está ante una gran oportunidad de aplicar su sapiencia y de conseguir una buena suma de dinero. Hace poco creó Caribe Dream Real Estate y siente que ha llegado su momento. Sin tiempo que perder, organiza a sus administrativas y las manda al hotel, en donde deberán contactar con el resto del equipo para que estén preparadas. Jason va a realizar las primeras llamadas y espera pescar algunos candidatos ya en esta ronda inicial.
Logo de la empresa regentada por Jason
Armado con su móvil de antigua generación, suelta un suspiro de placer al ver la lista de excel. El cosquilleo del telemarketing, un método que se asemeja bastante a un zoco fenicio, le trae buenos recuerdos y siempre consiguió grandes resultados. Teclea el número y se lanza a por la primera víctima ofreciendo billetes de avión y unas vacaciones gratuita ¿Quién no va a aceptar?
La sonrisa en las llamadas es primordial
Aunque parezca mentira, esto se ha utilizado en algunos canales de televenta, en los que te comunican que has ganado un viaje de 2000 euros a las playas de Benidorm, pero tienes que pagar 3000 euros más aparte para poder disfrutarlo. Lo hacían en 2006, cuando se estrenó esta película, y siguen haciéndolo, así que habrá gente que aceptará ofertas así de draconianas sin pestañear.
Uno de los telefoneados es el señor Le Fleur, que nos teletransporta automáticamente a la película Sunrise, que también tiene una trama de venta de bienes raíces en el Caribe y en la que Bruno Le Fleur es interpretado por el incombustible Alban Ceray. Un excelente guiño por parte del director a su propia saga, solo para auténticos seguidores del legado bellocchiano.
Llamando a los clientes con la lengua tibia de cerveza
Stella Artois aprovecha las escenas de las llamadas para hacer un product placement, claramente orientado a generar buenas sensaciones en el consumidor. Jason habla con los potenciales compradores desde una terraza en las playas de Guadeloupe, con una cerveza en la mano, y clamando por la suerte que han tenido los agraciados, al haber sido premiados con este viaje al paraíso.
Hotelazo para emprender con estilo
El centro de operaciones de Caribe Dream Real Estate es el Pierre & Vacances Village Club Sainte-Anne, situadas en la zona este de la isla de Grande Terre, la más grande del archipiélago de Guadeloupe.
Pronto llega el primer visitante. Mr. Sanson, el único que aceptó de toda la primera página de la lista. Recién aterrizado en Pointe-a-Pitre, se traslada hasta la Anse Mancellinier para ver con sus propios ojos la villa lamada Housing Cove Bay, con aparcamiento privado, piscina y dos jardines. Está disponible en Booking y TripAdvisor.
Casa con dos jardines y piscina
Camiseta hawaiana con diseño Borussia
La casa se alquila en TripAdvisor
Foto de la casa, en Booking
Página de Booking sobre la Housing Cave Bay
Foto aérea de la casa, que está en las siguientes coordenadas de Google Maps
Vista aérea de Bing maps
Reloj de oro blanco y camisa del chino
Las secretarias de Caribe Dream Real Estate se acicalan como para una boda
Jason le ofrece otro 10% de descuento si realiza el pago de la señal hoy mismo. Está desesperado por vender, pero es que es la única manera que tiene de salir adelante. Ha activado todas las palancas económicas posibles y necesita liquidez de forma urgente. Le añade un poco de “picante” a la compraventa y Mr. Sanson reacciona ofreciéndole el pago ipso facto, pero Jason le solicita que se lo pague directamente a las jóvenes comerciales que le harán compañía en el viaje en barco que le ha organizado para el día siguiente.
Mr.Sanson tiene más buenas noticias ya que le comunica que su hermano también busca villa en esta isla (bendita casualidad y qué raro que no puedan comprarse una villa vacacional entre los dos para destinarla a uso compartido). Jason no reflexiona sobre ello; lo que queda claro es que el agasajamiento ha dado sus frutos y todo vendedor sabe que el boca a boca trae más ventas que la puerta fría o la llamada inesperada.
El lado oscuro de la noche atrapa a Jason desde los primeros ingresos
Bebiendo whisky en una discoteca de Pointe-a-Pitre, Jason recibe la confirmación de que sus chicas han conseguido el cheque de 28000 dólares al contado. A cambio, le informa con la buena nueva de que Laura, la secretaria, va a enseñar otra casa en Anser Tarare, a dos interesados, que pagan con otro cheque nominativo.
Los distintos compradores se prestan las camisas, por lo visto
Secretaría en picardías... y le Ilet a Gourde, al fondo
Fue fácil situar la casa gracias a el Ilet a Gourde, que sale al fondo en la escena superior
Magnífica villa en medio de la más absoluta soledad. Perfecta para el rodaje
Está situada en estas coordenadas de Google Maps
Mejor calidad de imagen en Bing Maps
La vida le sonríe al bueno de Jason, que no hace más que acumular cheques y que ya ha alquilado un barco para darles un servicio a sus clientes sin necesidad de intermediarios.
La nueva oficina
Jason sueña con hacerse rico, y esto se retroalimenta porque el teórico comprador de la casa de Anser Tarare, ahora muestra interés por una segunda villa en la isla, y por esa compra adicional exige el mismo servicio completo a su colega que con la anterior adquisición.
La administrativa necesita ayuda con la crema solar
El home office en su máxima expresión
¡Esto da más dinero que los negocios de ingresos pasivos!
El amor...
En el embarcadero de la Marina de Saint Francois, Jason conoce por fin al hermano de Sanson, que adquiere una casa con un coste más elevado, y que le firma un autógrafo por el que se compromete a abonarle la ingente suma de 48000 dólares. Jason está en una nube, y por un momento, medita acerca de lo que ha logrado en tan solo dos semanas.
Caminando entre dársenas
Cara inexpresiva como una vaca hindú
Las empleadas van cada vez con menos ropa
Otro autógrafo para los fans
140.000 dólares de monto total ha calculado su contable, una morena joven y prometedora. La lista que le vendió Mr.X ha resultado ser una mina inagotable, como la veta madre de plata que encuentra la nave 7 de la TriOceanicCorp en la película Leviathan.
Las palancas han funcionado
Ahora Jason volará a París, pero todavía faltan dos días para eso, así que manda en avanzadilla a la contable para que cobre ya mismo los cheques en un banco de los Campos Elíseos. El plan es disfrutar con el dinero de unas merecidas vacaciones y repetir la jugada en un par de meses. Por desgracia para Jason, en la siguiente escena sale Mr.X cobrando a Sanson y a uno de los franceses 15000 dólares en negro.
Asociación de corsarios unidos
Todavía con el tupé de los 90
¡Viva la picaresca!
Ellos le dicen que las vacaciones les han salido baratas porque, a cambio de esos 5000 dólares por cabeza, los tres han disfrutado de casi 15 días en todo incluido, en hoteles de gran lujo. Lo del cheque sin fondos es una estratagema más vieja que el hilo negro, y pone el broche a esta película que ha pecado, en todo momento, de falta de acción.
Ahora que Jason se ha ido a París ha averiguar cuál es el problema con los cheques, enésimo error por exceso de confianza, Mr.X se apropia del barco que había sido alquilado a nombre de Caribe Dream Real Estate, y se lleva a su mujer a navegar.
Embarcación de la UE pero con un pirata al timón
Tras los pasos de Livingstone
La tranquilidad que se busca…
Ella, muy rubia, no entiende de dónde ha sacado el dinero, pero, haciéndose la tonta, presupone que habrá sido cosa del networking... que por algo está en boca de todos.
FIN
VALORACIÓN: 1/10
Ficha:
Private Tropical 20 "Caribbean Dream"
Título en castellano: “El sueño caribeño"
Año: 2006
Género cinematográfico del argumento: negocios
Destino paradisíaco: Isla de Guadeloupe
Actores estelares: Laura Prion, Sunny Day, Nikki Cider, Jane Cruising, Veronica De Arousa, Krystina Cee, Phil Holyshit, Horst Sharon, Philippe Bean, Sebastian Zarrio.
Dónde la puedo encontrar: Private o en una sencilla búsqueda en Google
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